Despues

domingo, 11 de noviembre de 2012

No se esta preparado hasta que se intenta. No se sabe lo que es hasta que lo vives. No se entiende hasta que te pasa. Si esperas el momento, no llegará, tienes que buscarlo, correr hacia él. Y hasta que no lo pierdes no te das cuenta de lo importante que puede ser ese momento. Un instante en el que todo esta bien. Ese instante perfecto. Jodidamente perfecto.
Un instante en el que pueda verte y sonreír, un instante en el que no te importe lo demás, que pase lo que pasa nada pueda borrar esa mirada de felicidad, esos ojos radiantes y esa sonrisa siempre en tu boca. Desafiando al mundo, retando a que te la quite, pero que nada lo consiga.
Levantarme por la mañana y no necesitar que nadie te alegre el día, pues ya es perfecto por el hecho de que estés ahí. Que hasta un lunes te parezca bonito solo por existir. Compartir momentos, risas o incluso lagrimas. Pero compartirlo. Llorar en solitario es amargo. Llorar juntos es bonito.
Todo eso forma parte de este momento, ese instante de perfección. La perfección esta en las pequeñas cosas? Mentira, la perfección esta donde tu la encuentres.

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